México y EUA acuerdan acciones para asegurar entrega de agua del río Bravo sin renegociar Tratado |
- Tendencia Capital
- 28 abr
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Garantizan México y Estados Unidos cumplimiento de asignaciones de agua del río Bravo y fortalecen cooperación
Con el objetivo de preservar el equilibrio hídrico en la frontera norte y en cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, los gobiernos de México y Estados Unidos alcanzaron un acuerdo estratégico para asegurar el flujo de agua del río Bravo en el actual ciclo de entregas que finaliza el próximo 24 de octubre.
El convenio, producto de intensas negociaciones técnicas, contempla transferencias inmediatas de agua y acciones específicas durante la próxima temporada de lluvias, con el propósito de mitigar un posible déficit en las asignaciones hídricas que México debe cumplir, informó el gobierno federal.
Fortalecen cooperación para garantizar el abastecimiento humano
En un comunicado conjunto, las secretarías de Relaciones Exteriores; Medio Ambiente y Recursos Naturales, y de Agricultura señalaron que prioridad de este acuerdo es salvaguardar el suministro de agua para consumo humano en las poblaciones mexicanas dependientes del río Bravo, cuya importancia es vital para la vida cotidiana y el desarrollo económico de la región fronteriza.
Durante las reuniones bilaterales, en las que participaron expertos de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), se estableció un plan de acción inmediato que será formalizado en el seno de la CILA en las próximas semanas.
Estas acciones incluyen:
Transferencias de volúmenes de agua a corto plazo.
Estrategias de aprovechamiento de lluvias.
Monitoreo permanente de las condiciones de la cuenca.
Coordinación binacional para prevenir afectaciones hídricas.
La sección mexicana de la CILA, en coordinación con la Conagua, dará seguimiento puntual a la ejecución de las medidas y diseñará un plan integral para el siguiente ciclo de entregas, que asegure el cumplimiento cabal de los compromisos derivados del Tratado de 1944.
Tanto México como Estados Unidos reiteraron su compromiso de respetar y mantener vigente el Tratado de 1944, al considerar que sigue siendo un instrumento de beneficio mutuo para la gestión sostenible del agua en la región fronteriza.
En este sentido, se acordó no renegociar el tratado, sino fortalecer los mecanismos de cooperación y transparencia, incluyendo consultas anuales de alto nivel para supervisar el cumplimiento de metas y anticipar posibles retos climáticos.
Las autoridades destacaron que el tratado ha permitido, durante casi 80 años, un desarrollo armónico en la zona fronteriza, beneficiando a millones de habitantes de ambos países.
El acuerdo representa un avance significativo en materia de seguridad hídrica binacional en un contexto donde la escasez de agua y los efectos del cambio climático representan desafíos crecientes.
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